sábado, 29 de octubre de 2016

La barrraca




  La barraca es una obra de Vicente Blasco Ibáñez (1867-1928). Es una crítica a la sociedad de la época. Fue escrita en la etapa del Realismo en la segunda mitad del siglo XIX.




  Ibáñez estaba comprometido con las clases populares y reflejaba sus ideas políticas en sus obras.Fue encarcelado por antimonárquico y anticlerical.




  La barraca es un relato de una lucha entre labriegos y propietarios, que tuvo por origen un suceso trágico y luego abundó en conflictos y violencia.




  El suceso trágico fue el arrebatamiento de las tierras cultivadas de generación en generación por el terrateniente tio Barret en una huerta valenciana por el propietario, el cual subía los impuestos (parte de la cosecha cultivada con la que pagaba el tio Barret su estancia en la barraca) aun que ya fueran suficientes. Este avariento individuo llamábase don Salvador. En un momento dado Barret fue incapaz de pagar a su arrendatario asi que este echó a su familia de sus tierras dejándola sin ningún bien. Barret cogió la venganza por su mano y mató al causante de su miseria quedando encarcelado hasta su asesinato.




  Las tierras quedaron inhóspitas e incultivadas durante años por la presión que el pueblo ejercía ante nuevas gentes cuyo propósito era trabajarlas. Pimentó es uno de los personajes que presionaba a las familias que intentaban cultivarlas mediante múltiples amenazas.




  Un día llegó al pueblo una familia gitana que se asentó sin problemas en la barraca abandonada y comenzó a restaurarla mañosamente. Pimentó engañó al nuevo propietario con las horas de riego y lo llevó al tribunal del agua, los cuales le impusieron una multa al recién llegado. Batiste logra superar las multas y mantener vivos sus cultivos.




  La hija del recién llegado ( Roseta) sufre bulling en su trabajo como costurera hasta que en una pelea le abren la cabeza. Se enamora de un muchacho que sirve para un carnicero. Él siempre la acompaña a la vuelta del trabajo por si le sucede algo, y por disfrutar de su compañía.




  Por culpa de los hijos de los labradores Pascualet (hijo de Batiste), cae a una acequia y enferma. Luego llega la muerte de Morrut (el caballo). Batiste viaja a Valencia a comprar un caballo nuevo que más tarde es asesinado. Al sospechar de Pimentó, Batiste lo intenta matar, pero fracasa en su intento.

  Pascualet acaba muriendo, y se crea un ambiente de culpabilidad entre las gentes contrarias a Batiste.

  Al final Batiste, afectado por esa felicidad de un tiempo de cosecha se dirige a la taberna Copa, donde se celebra una apueste entre Pimentó y otros. Al terminar esa apuesta Pimentó cuenta que, desde la llegada de Batiste a las tierras del tío Barret, los amos de sus tierras le perdieron el miedo y ahora le obligaban a pagar la renta. Esto hace que todas las miradas se dirijan hacia Batiste que, en defensa propia, le pega con un taburete en la cabeza y huye.

  El odio volvió, Pimentó se intenta vengar disparando a Batiste, el cual, le devuelve la bala que hará que muera. Por ello toda la huerta se venga de Batiste quemándole su barraca, y se vuelven a ver obligados a viajar.